IA al dÍA: ¿Revolución o burbuja?, la IA está transformando todo
11 marzo 2025 - Noticias y tips sobre Inteligencia Artificial
Pensamiento del día
“Jumping at several small opportunities may get us there more quickly than waiting for one big one to come alone“
- Hugh Allen
Imagen del día creada con IA
Temas de hoy
¿Estamos en una burbuja de IA?
La IA ya nos está reemplazando y no nos hemos dado cuenta
La IA está absorbiendo nuestra inteligencia
¿Estamos en una burbuja de IA?
Habemos personas que vivimos aquel momento hace algunos años en el que las empresas puntocom estaban en su mejor momento, todos alucinábamos con el desempeño de las grandes y nuevas empresas de internet. Hasta que toda esa ilusión (¿o alucinación?) llegó hasta el tope y tronó, conociéndose actualmente como la burbuja de las puntocom.
Algo similar está sucediendo actualmente con la Inteligencia Artificial, tan parecido que hasta parece un déja vù.
Las empresas gigantes de la tecnología están inyectando miles de millones de dólares en el desarrollo de la IA con el principal objetivo de no perder el momento, de sacar provecho y de convertirse en el primer y más importante jugador con esta nueva tecnología que cada vez tiene más relevancia.
Goldman Sachs asegura que no es lo mismo porque el crecimiento de las ganancias justifica las valoraciones en Bolsa. Sin embargo, hay personas que advierten que el mercado está mostrando señales de preocupación, como valoraciones extremas, expectativas irreales y sólo algunas empresas están soportando todo el peso de los mercados, como Nvidia.
Lo que es un hecho es que estamos en medio de la definición del futuro tecnológico.
La IA es una herramienta extraordinaria pero no es magia, por lo que te sugiero no poner todas tus fichas en Inteligencia Artificial y mejor enfócate en estrategias que generen valor real, sostenible y replicable.
La IA ya nos está reemplazando y no nos hemos dado cuenta
El impacto que la Inteligencia Artificial está teniendo en nuestro mundo y en nuestro presente está siendo mucho más profundo de lo que creemos.
Un estudio reciente realizado por un grupo de científicos analizó más de 300 millones de textos con diferentes temáticas, industrias y contenidos como servicio al cliente, comunicación y organización corporativa, ofertas de empleo y publicaciones de organismos internacionales, y el resultado me dejó con la boca abierta: hasta una cuarta parte de los textos analizados ya habían sido generados o modificados por IA.
Desde noviembre de 2022 que se realizó el lanzamiento oficial y democrático de ChatGPT, la adopción de los LLM ha crecido exponencialmente.
A finales del año 2024:
- 18% de los reclamos de los consumidores ya son redactados por IA
- 24% de los comunicados de prensa muestran la huella de haber sido co-creados por la IA
- En las ofertas de empleo, las pequeñas empresas recurren a la IA en casi 10% de sus publicaciones
A pesar de esta aceleración, los científicos revelan que el crecimiento parece haberse estabilizado.
Si estamos en la industria del contenido vale la pena encontrar nuestro diferenciador, el valor que nosotros le damos al contenido a diferencia del que es generado únicamente con IA.
La IA está absorbiendo nuestra inteligencia
Habemos personas que hemos integrado algunas herramientas de Inteligencia Artificial a nuestras vidas y hábitos diarios, pero resulta que según un estudio realizado por Microsoft y Carnegie Mellon, no nos da muy buenas noticias.
Resulta que si utilizamos la IA buscando soluciones rápidas y prontas, sin que necesariamente leamos las respuestas y los procesos “lógicos” del contenido que nos ofrece podríamos estar expuestos a la pérdida de pensamiento crítico.
Si creemos, pensamos y nos dejamos llevar por la idea de que cualquier respuesta que nos ofrezca la Inteligencia Artificial siempre está en lo correcto, definitivamente empezaremos a pensar por nosotros mismos.
En conclusión, el impacto de la IA en nuestra capacidad cognitiva dependerá de cómo la utilicemos. Si la tratamos como herramienta de apoyo y complemento podemos aprovechar su poder sin perder nuestra capacidad de análisis.